jueves, 28 de marzo de 2013

MIÉNTEME, DIME QUE ME QUIERES




He visto la escena de Johny guitar. No dice la frase así tal cual, parece que la memoria se queda con lo fundamental, y saca la esencia de lo que en realidad ocurre.
No es importante cuales son las palabras exactas, lo que es mágico es como la ficción que él pide hace que sus sueños se conviertan en realidad. La generosa  respuesta de la amante abandonada, hace que las heridas se desvanezcan y puedan continuar donde lo dejaron, a pesar del tiempo transcurrido, como si nada…como si todo. Él le hace a ella un regalo disfrazado de petición, porque le permite desnudar su añoranza sin  herir su orgullo que él un día pisó.
Ahora ambos, después de muchas vueltas en su vida, le dan el verdadero valor a su amor, esto es la madurez, volver a casa tras la aventura, cansado y magullado, el ego domado, convertido de caballo loco en la montura perfecta, uno a uno con el jinete, compenetrados…
Me he emocionado al ver la escena, creo que es una de las más tiernas escenas de amor que se han podido imaginar, porque hay perdón y aceptación, humildad y grandeza, rendición y victoria a mí me ha conmovido hasta la médula…